Henry Schiliemann

Henry Schiliemann nació el 6 de enero de 1822 en el ducado de Mecklenburg-Schwerin. Su madre murió dando luz cuando él tenía 9 años. Su padre era el párroco de la aldea y le leyó la Ilíada a los 8 años que desde entonces estuvo convencido de la veracidad de la guerra de Troya.

A los 14 años trabajó como aprendiz en una tienda de ultramarinos. Aprendió hasta ocho idiomas ya que con el tiempo se convirtió en un agente de una casa de comercios realizando continuos viajes. Con 36 años se retiró de  los comercios acumulado ya una discreta fortuna con el fin de emprender unas excavaciones arqueológicas. Estudió arqueología en París y se trasladó a Grecia y Asia Menor para excavar.

En 1873-74 localizó la ciudad en Hisarlik (Imperio Otomano) pero descubrió que era una ciudad de la ciudad del Bronce y que la Troya homérica se encontraba en un nivel superior.

Después de la disputa en torno a las joyas que había descubierto, dee 1876 a 1878 excavó las tumbas de los reyes micénicos en Micenas, además realizó excavaciones en la isla de Ítaca en 1878 y en Orcómeno en 1881-1882. En 1884-1885 desenterró los restos de un gran palacio en Tirinto, Grecia. Gracias a sus hallazgos, se piensa que el relato de Homero sobre la guerra de Troya se basa en hechos reales. Sus libros y artículos transmitieron al público la emoción que sentía por la arqueología.

Murió el 26 de diciembre en 1890 en Nápoles, Italia. Falleció a causa de que se quedó desplomado paralizado en una plaza pública y el hospital le rechazó como indigente porque no llevaba ni dinero ni documentación.